Carta del pueblo

Queridos tíos y primos:

Me alegraría que a la llegada de esta a vuestro poder os encuentréis bien; nosostros quedamos bien , (g a D).
El motivo de la presente es deciros que el niño (nosotros le seguimos diciendo niño, como lo llamaba abuela) está mucho mejor y ha sacado bien el curso.

Este año ha asistido al Taller de la Memoria (a veces al pobre se le va la pinza), a Gimnasia de Mantenimiento y a Informática.

No veáis el vicio que ha cogido con los ordenadores; se acuesta a las tantas, dice que ha editado un blog y que chatea con un amigo de cuando hizo la mili en Sidi Ifni.

Hoy mismo se ha presentado con un diploma de los de verdad; viene su nombre escrito con letras grandes de de imprenta. Dice que de ahora en adelente nada de llamarle Niño,  Pepe o Pepinillo, que le digamos Don José; que por algo es Diplomado. Acaba de salir con el diploma a la tienda de marcos para enmarcarlo y colgarlo en el comedor.

Y no para de hablar de Mónica, de Fernando, de Aditec , de la Obra Social Catalunya Caixa y de la nueva corporación; dice que gracias a ellos lo ha conseguido.

Como os decía, ha mejorado mucho, aunque sigue con sus rarezas; yo lo veo hasta más joven, con mejor humor, como si los años no pasaran por él; sin olvidar que va camino de los ochenta.

La Informática ha sido su mejor medicina; ya no se acuerda del colesterol, ni del reúma; que antes estaba un día sí y otro también camino del médico. Ahora come bien y de todo, se da una buena caminata cada día, hace gimnasia al levantarse y se pone a bailar cuando oye las canciones modernas de la radio. Desde luego, no parece el mismo.

Bueno, no dejéis de cuidaros, y en la vuestra nos contáis cosas del pueblo.

Recibid un fuerte abrazo de vuestros primos y sobrinos, que lo son

P D Le dais recuerdos a Deme, a las dos Charos, a doña Gloria la Sesentona, a Carmen, a Loli, a Román y a los demás vecinos.